Un anciana rica y bonachona anciana decide dejar toda su fortuna a su fiel gatita y sus tres crías, cosa que no agrada nada al criado de la mujer, que lleva sirviendo toda su vida en la casa familiar para poder conseguir tan tamaña herencia. Furioso, el mayordomo decide tomar medidas drásticas: secuestra a los cuatro felinos y los abandona lejos de la masión y de la ciudad. A partir de aquí, los aristogatos emprenderán un interminable camino de regreso a casa, descubirendo el mundo a cada paso y teniendo como guía al Don Juan de los gatos callejeros.