Si alguna vez se ha preguntado cuánto sería capaz de pagar por la casa de sus sueños, Pang Ho-cheung le replantea la pregunta con Dream Home: ¿Qué estaría dispuesto a hacer para bajar el precio de la casa de sus sueños? Cheng, su pluriempleada protagonista, lo tiene bien claro: coger las herramientas de su difunto padre y hacer correr la sangre. Centrada en los días anteriores a la explosión de la burbuja inmobiliaria, el realizador de Isabella continúa retratando las cuitas de la sociedad hongkonesa con una inesperada y contundente incursión en el gore. Una crítica abrasadora, de intrincada estructura y macabra elegancia, que remueve algo más que la conciencia.