Muchas personas desearían que esas y tantas otras producciones de corte religioso llegaran a las salas de cine de sus ciudades pero, por diversos factores, no siempre es posible. Sin embargo, las más de las veces ni siquiera se conocen y no precisamente porque no valga la pena darlas a conocer. ¿Qué hacer?
Hay portales especializados en estas temáticas y en hacer recomendaciones, inclusive de películas de corte no religioso pero que contribuyen para ayudarnos a discernir qué conviene ver.