Los técnicos del Centro Nacional Espacial de EE.UU, supervisando el sistema solar, ven que de repente un cometa hace un giro inesperado e impacta sobre Marte, desviando su destino hacia la Tierra. El pánico invade a los científicos que evalúan los efectos de la radiación y la capacidad para destruir a toda la ciudad y, muy posiblemente, a todo el planeta.