Need for Speed vuelve un año más, abandonando las persecuciones de Hot Pursuit y apostando de nuevo por una historia cinemática. La de The Run nos lleva a una carrera por todos los Estados Unidos, de costa a costa, desde San Francisco a Nueva York. Nuestro protagonista tendrá que correr en carreras ilegales por ciudades de todo Estados Unidos, mientras le persigue la policía. Además de tener que quedar los primeros, configurar nuestro coche y explotar sus posibilidades, el juego también nos propone eventos cinemáticos en los que tendremos que interactuar con el escenario.