Rise of Nightmares es el primer juego de terror para Kinect, usando la detección de movimiento sin mando de la consola Xbox 360 de Microsoft para intentar sumergirnos en un mundo de miedo. Se inspira en otros juegos de terror y en clásicos de la literatura del género para plantearnos una aventura en la que podremos movernos con libertad o elegir que el juego nos lleve sobre raíles, interactuando con el escenario moviendo nuestras manos, y recibiendo sustos de los que tendremos que librarnos con el movimiento de nuestro cuerpo. Uno de los juegos más originales que se han hecho para Kinect.