Un oficial alemán visita el campo de concentración de Gensdorff. Un grupo de prisioneros se encuentra jugando al fútbol y al oficial, que fue jugador antes de la guerra, se le ocurre organizar un encuentro entre una selección alemana y los prisioneros. Los aliados en un principio se niegan, pero comprenden que puede ser una ocasión única para evadirse y terminan por aceptar el reto. El partido se celebra, y al descanso, momento en el que los prisioneros piensan fugarse, se llega con victoria de los alemanes.
II Guerra Mundial. Deporte (Fútbol) / "Aunque la historia resulte bastante predecible e increíble, una entretenida cinta que alcanzó buenos números en taquilla" (Fernando Morales: Diario El País)