Se devastan Cheryl (Alexandra Paul) y Greg (Bruce Boxleitner) cuando descubren que su hija adoptiva está sufriendo de leucemia. La situación es complicada más a fondo por el hecho de que su padre biológico, Kurt (Michael Riley), que se sabe que es un criminal violento, puede ser el único donante compatible. La familia comienza a buscarlo, y logran contactarlo en su apartamento. Allí, Cheryl hace un descubrimiento espantoso, Kurt esta fugitivo, procurando escapar lo mas lejos de la autoridad. El criminal desesperado hace un esfuerzo por escaparse, secuestrando a su propia hija como rehen, mientras que los padres desesperados recurrirán a cualquier medio necesario para rescatar a su hija que muere.